No sé si son lo peor, creo que hay cosas peores.
La mía es muy generosa, preocupada de todos sus hijos y sus nietos, especialmente de los míos, los regalones. Tiene un corazón muuuuy grande, y lamentablemente una boca del mismo tamaño, y ahí es donde falla.
Hace un buen tiempo que no nos hablamos, ya no visito su casa, sí mis hijos que mantienen contacto permanente y obviamente su hijo, mi marido. Ella está muy sentida conmigo porque le dije que no discutiría más el tema de si mandaba o no a mis hijos al colegio cuando lloviera, suena ridículo, pero estaba muy acostumbrada a darme órdenes telefónicas "hoy no mande a los niños al colegio que va a llover" y tanto me llenó la paciencia que un día me agarró atravesada y le contesté, pero siempre respetuosamente. Fue tan grave para ella ese "rayado de cancha" de mi parte, que no me habló más. No obstante, no creo que sea lo peor.